Prince of Persia, de Ubisoft, abre un nuevo camino con Prince of Persia: The Lost Crown, una aventura metroidvania en 2,5D que revitaliza la franquicia manteniéndose fiel a su espíritu. Este cautivador viaje no sólo ofrece una narrativa convincente, sino que también cuenta con diversas mecánicas de juego, innovadoras características de accesibilidad y un mundo rebosante de secretos por descubrir.
Una cara nueva en Persia
Metiéndote en la piel de Sargón, miembro de la élite de los Inmortales, los jugadores se embarcan en una misión para rescatar al príncipe Ghassan, secuestrado, de las garras del enigmático Monte Qaf. La narrativa se desarrolla con intrigantes giros, animados por escenas visualmente impactantes que recuerdan al anime. Aunque el juego adopta un estilo artístico caricaturesco, algunos pueden encontrarlo menos impactante durante el juego que el estilo cinematográfico de las escenas.
Dominar las Profundidades Laberínticas del Monte Qaf
The Lost Crown adopta los principios básicos del género Metroidvania, presentando a los jugadores entornos interconectados, secretos ocultos que esperan ser desenterrados y habilidades desbloqueadas progresivamente que amplían el repertorio de Sargon. A lo largo de la aventura, Sargon adquiere un arsenal diverso, que va desde habilidades estándar como el doble salto y el salto rápido, hasta habilidades únicas basadas en el tiempo que añaden profundidad estratégica a los encuentros de exploración y combate.
La jugabilidad combina a la perfección el combate, las plataformas y la resolución de puzles, manteniendo un alto nivel de compromiso en todo momento. Los combates ofrecen una sorprendente profundidad táctica, con ataques básicos y habilidades especiales que exigen pensamiento estratégico para superar a los enemigos. Las secciones de plataformas ponen a prueba la precisión de los jugadores y su dominio de las habilidades de movimiento de Sargon, exigiendo saltos calculados, carreras por las paredes y el uso hábil de sus habilidades únicas para navegar por entornos traicioneros.
Las batallas contra jefes son los momentos más emocionantes del juego, ya que exigen que los jugadores utilicen todas sus habilidades y su pensamiento estratégico para salir victoriosos. Estos encuentros están meticulosamente diseñados para desafiar incluso a los jugadores más experimentados, obligándoles a adaptar su enfoque y aprovechar todo el potencial de Sargon para vencer a estos formidables enemigos.
Un compromiso con la accesibilidad
The Lost Crown da prioridad a la accesibilidad, ofreciendo una variedad de características que se adaptan a las preferencias y niveles de habilidad de los jugadores. Los jugadores pueden adaptar el desafío a su experiencia deseada mediante una serie de opciones de dificultad personalizables, que les permiten ajustar factores como el daño y la salud de los enemigos. Además, se pueden desactivar los marcadores de objetivos opcionales para aquellos que busquen una experiencia de exploración Metroidvania más tradicional, animando a los jugadores a confiar en sus propias habilidades de exploración para descubrir los secretos del Monte Qaf.
Una de las características de accesibilidad más innovadoras es la introducción de los «fragmentos de memoria». Este ingenioso sistema mejora significativamente el retroceso, un elemento común en los juegos Metroidvania. Los jugadores pueden marcar lugares específicos y hacer capturas de pantalla con los Fragmentos de Memoria, lo que les ayudará a volver a visitar zonas con nuevas habilidades y a no perderse recompensas potencialmente valiosas escondidas por todo el Monte Qaf.
Un digno sucesor
Prince of Persia: The Lost Crown insufla nueva vida a la franquicia, ofreciendo una nueva visión del legado de la serie, pero manteniéndose fiel a sus principios básicos de acción acrobática y exploración. Aunque a veces el retroceso puede resultar tedioso, la atractiva jugabilidad de The Lost Crown, sus innovadoras características y sus gratificantes desafíos lo convierten en una entrada destacada en el género Metroidvania. Con su cautivadora historia, su variada jugabilidad y su compromiso con la accesibilidad, Prince of Persia: The Lost Crown tiene el potencial de convertirse en una apreciada adición a la franquicia y al género Metroidvania en su conjunto, dejando una impresión duradera tanto en los recién llegados como en los veteranos.
Conclusión
Prince of Persia: The Lost Crown es una fantástica experiencia metroidvania que satisface tanto a los veteranos como a los recién llegados al género. Sus opciones accesibles y su jugabilidad bien diseñada establecen un nuevo estándar para el género, mientras que su cautivadora historia y sus impresionantes efectos visuales dejan una impresión duradera. A pesar de los ocasionales picos de dificultad, Lost Crown es un juego imprescindible para cualquiera que busque una aventura desafiante y gratificante.
Lo bueno
Combate soberbio: Los enemigos son diversos y requieren pensamiento táctico, mientras que las batallas contra los jefes son épicas y desafiantes.
Exploración atractiva: Los elementos básicos de los metroidvania, como los niveles interconectados, los secretos ocultos y las mejoras, mantienen la emoción.
Opciones accesibles: Los controles deslizantes de dificultad, las ayudas de plataformas y la exclusiva herramienta «Ojo del Errante» hacen que el juego sea accesible para todos los jugadores.
Narrativa convincente: La historia se desarrolla con giros, traiciones y momentos emotivos, manteniéndote involucrado.
Un mundo hermoso: Entornos variados, efectos visuales impresionantes y fondos detallados hacen que sea un placer explorar el Monte Qaf.
Lo menos bueno
Algunas secciones de plataformas frustrantes: Ciertas zonas pueden resultar agotadoras, ya que requieren saltos precisos y reflejos rápidos.