El nuevo año sigue siendo tumultuoso para la industria de los videojuegos, y Riot Games ha anunciado despidos que afectan aproximadamente al 11% de su plantilla mundial, lo que supone unos 530 empleados. La empresa también está racionalizando su cartera con el cierre de Riot Forge, la reducción de otros proyectos y la priorización de sus cuatro títulos principales: League of Legends, Teamfight Tactics, Valorant y Wild Rift.
Esta ronda de despidos se atribuye a los mismos factores que han afectado a otras empresas en los últimos meses: una expansión demasiado ambiciosa y la dispersión de recursos en demasiados proyectos. En un comunicado, el director ejecutivo Dylan Jadeja y el director de operaciones Marc Merrill reconocieron este paso en falso, afirmando: «En los últimos años, a medida que Riot duplicaba con creces su plantilla, repartimos nuestros esfuerzos entre más y más proyectos sin tener las cuchillas suficientemente afiladas para decidir qué necesitaban más los jugadores». Sin embargo, mantuvieron que la mayoría de los recortes se están realizando en áreas ajenas al desarrollo central.
Aunque las indemnizaciones por despido que incluyen al menos seis meses de salario, primas por rendimiento, asistencia sanitaria continuada y prestaciones adicionales como ordenadores portátiles y ayuda para encontrar trabajo pueden ofrecer cierto consuelo a los afectados por los despidos, el impacto sigue siendo significativo. El cierre de Riot Forge, un programa que permitía a los desarrolladores independientes colaborar con Riot en proyectos inspirados en su IP, señala un cambio hacia una estrategia más centrada. Además, Legends of Runeterra está sufriendo una reorganización, con despidos y un énfasis renovado en la vertiente PvE, en particular Path of Champions, que será el principal foco de atención del juego en el futuro.
El futuro del esperado MMO de Riot sigue siendo incierto, aunque la empresa ha confirmado que la segunda temporada de la serie de animación Arcane se estrenará en noviembre. También afirman que tienen «una serie de proyectos cocinándose en diversas fases de I+D», insinuando posibles nuevas empresas en ciernes.