Frontier Developments plc (AIM: FDEV, ‘Frontier’) ha lanzado hoy la actualización 15 para Elite Dangerous: Odyssey, que marca la siguiente etapa de la guerra de los Thargoids contra la humanidad. Los comandantes descubrirán el misterio de lo que hay dentro de cada uno de los ocho Maelstroms, mientras se adentran en las gigantescas nubes de gas cáustico que llegaron con la actualización 14 y se enfrentan a un nivel de agresión Thargoide sin precedentes. La actualización 15 también aporta importantes novedades al juego, como una nueva clase de nave Thargoid y elementos adicionales para las misiones a pie.
Equipando su nave con el nuevo módulo Neutralizador de Pulso Thargoide, los comandantes podrán evitar que el pulso de apagado del Maelstrom afecte a su nave, lo que les permitirá adentrarse más en la nube. Allí les espera un espectáculo extraordinario y nuevos descubrimientos, por no hablar de las decenas de naves Thargoid.
Entre ellos, se encuentra el Glaive, la primera nave Thargoid de clase Cazador añadida a Elite Dangerous, con una presencia formidable. Esta nave agresiva y ágil se comporta de forma diferente a otros combatientes Thargoid, desplegando medidas que impiden a las naves humanas realizar una huida rápida. Este añadido a su flota significa que los comandantes tendrán que replantearse su enfoque estratégico para los numerosos encuentros en el juego.
Además, esta actualización trae un nuevo tipo de misión a pie a Elite Dangerous: Odyssey. Los comandantes las encontrarán en puertos estelares afectados por la Guerra Thargoid, con el objetivo de llevar a los jugadores a un asentamiento abandonado donde se les encomienda restaurar la energía para ayudar en el conflicto en curso. Una vez que lleguen, tendrán que enfrentarse a una nueva y misteriosa variante del carroñero Thargoid llamada Revenant, un poderoso centinela enemigo que requiere de algo más que un simple enfoque de correr y disparar en combate.
