GOA y Riot Games revelan un nuevo campeón en su juego de estrategia y RPG, League of Legends, que empecerá su pretemporada el día 27 de Octubre. Recordemos que la beta abierta dará comienzo una semana antes donde todos los jugadores podrán coger el ritmo del juego y preparar el comienzo de la pretemporada.
Aquí os dejo un poco de historia y características del nuevo campeón, Nasus, conservador de las arenas
“La enigmática criatura conocida como Nasus llegó a la Liga desde un mundo lejano, un vasto y docto imperio del desierto. Gracias a su erudición y al respeto que se le profesaba había sido nombrado Guardián de la Gran Biblioteca, aunque también era parte de una raza de seres salvajes que servían como gobernantes y protectores del pueblo. La guerra era un suceso más que habitual, ya que algunos de sus congéneres ansiaban esclavizar a la plebe e instaurar un gobierno totalitario. En medio de una fogosa batalla, justo cuando estaba a punto de acabar con su traicionero hermano Renekhton, Nasus fue invocado a Runaterra. No fue difícil convencerlo de que se necesitaban campeones para combatir la injusticia, por lo que ocupó su lugar en la Liga de Leyendas. Ahora es el conservador de las arenas y en ningún sitio se siente más cómodo que entre las ruinas del desierto de Shurima.
Nasus ataca a sus enemigos invocando los poderes místicos de su imperio. Puede ordenar a los vientos que los envuelvan en una cegadora tormenta de arena, o bien lanzar una antigua maldición que los incapacite al tiempo que roba su percepción. Como guardián de las puertas de la muerte, puede arrastrar hacia el inframundo a los oponentes que ya hayan iniciado ese viaje. También es capaz de invocar feroces escarabajos devoradores de carne que se dispersan con violencia al ser devueltos al inframundo, dejando atrás los restos destrozados de sus enemigos. Por si fuera poco, las ataduras de la distancia no afectan a Nasus, que es capaz de teletransportarse entre dos rivales para acosarlos casi al mismo tiempo.
El conservador de las arenas es un ser contemplativo, pero ay de quien ose interponerse en su camino.”